Lunes 27 de enero de 2020
Después de una caminata de cuatro días, este domingo llegó a la ciudad de México la llamada Caravana por La Paz; que incluyó sobre todo a familiares de víctimas de la delincuencia, cuya iniciativa se originó ante la ola de hechos violentos en México y cuya intención fue entregar a los senadores y al gobierno federal, (en este caso al gabinete de seguridad) un documento que contiene sus propuestas sobre justicia transicional.
Desde su anuncio, el gobierno federal descalificó las acciones de este grupo de ciudadanos pues para empezar el presidente AMLO lo llamó «show mediático», -antes le importaba más ser popular, cercano a la gente-, ahora le preocupa cuidar la investidura presidencial, incluso frente a ciudadanos que lo que buscan es ser voz de muchos mexicanos hartos de la delincuencia, de la impunidad, de la ausencia de actuación efectiva y útil por parte de nuestros gobernantes para detener los miles de crímenes que se cometen diario.
Luego, los senadores, también despreciaron la llegada del contingente, tal vez también quisieron proteger la «investidura legislativa»; y sólo algunos como el independiente Emilio Álvarez, Xóchitl Gálvez del PAN, Claudia Ruiz del PRI, Patricia Mercado y Dante Delgado de MC y Miguel Mancera del PRD, los recibieron. Ninguno de Morena, ninguno del Partido del Trabajo y ninguno de Encuentro Social.
Y para seguir con el desdén, con insultos, gritos, empujones y agresiones de todo tipo, un grupo de simpatizantes de AMLO, les dieron la «bienvenida» en el zócalo capitalino.
En serio, ¿esto es transformación? es descomposición, división, disgregación, rompimiento de una sociedad poco solidaria, harta, insatisfecha, irritada y muchos calificativos más podríamos enumerar, el hecho es que el director de la orquesta no tiene ninguna batuta en la mano.
Y cómo no entenderlo, este fin de semana, se confirmó lo que está pasando en Morena, el partido que ¡¡¡¿gobierna?!!! la división a la orden del día, un escenario de hostilidad y rivalidades necias en su Congreso Nacional Extraordinario que llevaron a cabo para buscar lo que tanto les falta, definición de liderazgos.
Como diría el analista Roberto Rock, «podemos estar viendo en Morena un partido que comienza su putrefacción antes de haber alcanzado la madurez».
El problema es que son gobierno, son quienes dictan las leyes en este país, son mayoría, a veces mayoría ausente; todo sea por cuidar la investidura.
Gracias por leerme en este espacio. Hasta la próxima si no pasa otra cosa.
América Montoya
