Premiando abuso e incompetencia

Marco Antonio Ferriz ZMarco Antonio Ferriz Z.

Si hay algo de verdad en la afirmación de la gobernadora Lorena Cuéllar Cisneros, de que los actuales funcionarios de su gabinete están a prueba por un periodo de cuatro meses, entonces iniciando el próximo año deberá hacer cambios sustanciales y llamar a nuevos colaboradores, comenzando por aquellos y aquellas que formaron parte de la pasada Legislatura local.

No fue poca cosa la forma de cómo se comportaron los ex diputados y ex diputadas: avaricia, abuso, incompetencia y los que se acumulen.

No se entiende por qué, pese a su larga trayectoria política, Cuéllar Cisneros decidió incorporar a personas tan incompetentes a su gabinete. Es mucho el camino por ella recorrido como para pensar que se le presentó un problema similar al de su antecesor, Marco Antonio Mena Rodríguez: la falta de equipo.

Ella misma, a través del veto realizado a tres ordenamientos jurídicos locales que aprobó la pasada Legislatura, los desnudó en su incompetencia. Por qué entonces premiarles con una responsabilidad dentro de su gobierno.

Esos son los casos de María Ana Bertha Mastranzo Corona, Mayra Vázquez Velásquez, Víctor Castro López, Luz Vera Díaz y María del Rayo Netzáhuatl Iluicatzi, quienes forman parte del gabinete ampliado. Ramiro Vivanco Chedraui con el premio mayor responsabilizándosele de la Oficialía Mayor de Gobierno.

Podría ser un pago de facturas políticas, que en algunos casos no se entiende porque a pesar de los millonarios recursos económicos que manejaron para su causa, con cargo al presupuesto del poder Legislativo, perdieron su respectiva elección cuando buscaron acomodarse en una presidencia municipal. Son los casos, por ejemplo, de Víctor Castro López y de Mayra Vázquez Velásquez.

En el caso de las cuatro ex diputadas y dos ex diputados que ahora forman parte del gabinete, su incompetencia no solo fue exhibida con el veto realizado este jueves 9 de septiembre por la gobernadora Lorena Cuéllar, sino que detrás ya tenían un largo recorrido de vetos realizados por Marco Antonio Mena, que ya ni siquiera después fueron corregidos porque se quedaron en la congeladora legislativa.

Sin embargo, no se trata solo de incompetencia. La presidenta de la mesa directiva del Congreso local, Alejandra Ramírez Ortiz, ha desnudado otra parte: la avaricia y el abuso con que se comportaron esos seis que ahora forman parte del gabinete ampliado, al informar que el Órgano de Fiscalización Superior (OFS) ha iniciado un dictamen con respecto a diversos faltantes que se detectaron en la actual Legislatura durante el proceso de entrega-recepción.

Y ya no digamos de las plazas labores que de última de adjudicaron varios ex diputados y ex diputadas, para beneficiar a familiares y a cercanos.

Lo deseable en el caso de los faltantes descubiertos en el Congreso del estado, es que no haya el circo al que estamos acostumbrados cada tres años. La próxima procuradora General de Justicia tendrá en sus manos el expediente para deslindar responsabilidades.

Sin embargo, independientemente a los bienes faltantes, porque no se sabe si los ex diputados y ex diputadas son responsables, lo que sí está comprobado es la avaricia, la incompetencia y el abuso.

Este gobierno, en tal sentido, no entró con el pie derecho, más aun sabiendo, porque ha sido público, la serie de irregularidades que ex legisladores y ex legisladoras cometieron a su paso por el Congreso local. Pero no es tarde. Aún puede rectificar. Enero será un buen momento para hacerlo.

Leave a Reply

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

*