Tlaxcala, Tlax; 12 de octubre de 2023 (Selene Sosa) Activistas del estado de Tlaxcala se mostraron inconformes con las recientes declaraciones de la Jefa del Ejecutivo Local, Lorena Cuéllar Cisneros, por lo que no dudaron en emitir un pronunciamiento al respecto.
En el primer caso, luego de la Marcha por Tlaxcala del pasado domingo, la Gobernadora del Estado desacreditó la movilización al decir que, quienes participaron en ella, “no aman a Tlaxcala” y solamente buscan “atacar” políticamente a s sexenio.
Como resultado de dichas declaraciones, la directora de la fundación “Corazonadas de amor contra la leucemia”, Haydee Noya, emitió un comunicado que difundió en sus redes sociales, en donde le respondió.
“Nosotras, la sociedad civil, hemos alzado la voz para señalar las omisiones y agresiones del gobierno, y para denunciar el hostigamiento que sufrimos como activistas, No somos enemigas de Tlaxcala; somos sus guardianas, sus defensoras y queremos un futuro donde la justicia y la equidad sean los cimientos de nuestra sociedad”.
Asimismo, la también representante del colectivo “AbanDONNA el miedo” puntualizó que, como sociedad civil organizada y como activistas, no van a permitir que se les intente silenciar, ya que merecen respeto.
“…vemos una carente empatía por parte de la gobernadora hacia nosotras las mujeres. Nosotras, merecemos ser escuchadas, respetadas. No vamos a permitir que se nos silencie ni que se ignore nuestra voz”.
En una segunda ocasión, la primera mandataria fue entrevistada por la prensa nacional al salir de la Conferencia Matutina del Presidente de México, a ellos, Lorena Cuéllar, les aseguró que la trata de personas ya no era un problema para Tlaxcala.
Esto también causó opiniones entre las activistas y defensoras de derechos humanos en la entidad, como Edith Méndez Ahuactzin, directora del Colectivo Mujer y Utopía (CMU), quien indicó que el hecho de que no haya carpetas de investigación sobre trata de personas, no quiere decir que el problema esté resuelto.
Incluso, la activista alertó y lamentó, que las denuncias no son clasificadas por trata de personas, ello, sumado a la omisión, negativa y desconocimiento de las autoridades estatales, solamente agrava aún más el problema.
